¿Sabías que cuando empiezas a tener sed ya estás deshidratado? No esperes a estar sediento para tomar agua. Si quieres mantenerte hidratado, sigue estos sencillos consejos para dominar un hábito de hidratación que dura toda la vida.

La sed no es un indicador útil de hidratación.

De hecho, cuando empiezas a sentir sed, es posible que ya estés deshidratado, ya que tu cuerpo ha perdido entre 1% y 2% del contenido de agua. Con este nivel de pérdida de agua, puedes comenzar a experimentar problemas cognitivos como estrés, agitación y olvido, por nombrar algunos.

En teoría, un líquido que aumenta el estado de ánimo, ayuda al cuerpo a funcionar correctamente y elimina el exceso de toxinas debería ser la estrategia a seguir para mejorar la salud. Pero, a pesar del hecho de que es esencial para sobrevivir, y que el cuerpo está compuesto en un 60% por agua, a menudo se convierte en un nutriente olvidado.

La falta de agua provoca deshidratación, que es una afección que ocurre cuando no tienes suficiente agua en el cuerpo. Incluso una deshidratación leve puede quitarte la energía y hacer que te sientas cansado.

«Descubrir qué tan hidratado estás es solo una parte de la ecuación. Incrementar tu consumo de agua requiere práctica y consistencia«

¿Cómo saber si estás hidratado?

Los médicos dicen que un análisis rápido de orina podría ser la forma más efectiva para saber qué tan hidratado estás. Simplemente, mira el color de tu orina. Si es amarillo pálido, estás hidratado. Si es un amarillo más oscuro, es hora de tomar uno o más vasos de agua.

La cantidad de agua que necesitas para mantenerte hidratado depende de varios factores, como la alimentación y la forma en que ejercitas el cuerpo. La hidratación adecuada puede variar incluso según la estación del año o el clima en un día determinado.

Descubrir qué tan hidratado estás es solo una parte de la ecuación. Incrementar tu consumo de agua requiere práctica y consistencia.

¿Cuánta agua hay que beber?

El agua es el componente químico principal del cuerpo y representa el 60% del peso corporal. 

Cada célula, tejido y órgano del cuerpo necesita agua para funcionar correctamente. Algunas de las funciones que cumple el agua son:

• Eliminar los desechos a través de la orina, la transpiración y las evacuaciones intestinales
• Mantener la temperatura en un nivel normal
• Lubricar y amortiguar las articulaciones
• Proteger los tejidos sensibles

Entonces, ¿cuánto líquido necesita un adulto promedio y saludable, que vive en un clima templado? De acuerdo con la Clínica Mayo, el consumo diario de agua necesario es el siguiente:

• Aproximadamente 3.7 litros por día para hombres
• Aproximadamente 2.7 litros por día para las mujeres

Sigue estos sencillos pasos para ayudarte a formar un hábito de hidratación constante:

1. Toma notas

No empieces tratando de tomar 12 vasos al día. Mejor, inicia poco a poco y establece objetivos alcanzables. Para mejorar, hay que establecer un punto de partida. Toma nota de las bebidas que bebes, los alimentos que comes y cómo te sientes durante el día.

2. Elije un método para probar

Ahora estás listo para comenzar a experimentar. Hay muchos trucos que las personas usan para beber más agua y mantenerse hidratadas. Comienza eligiendo uno de los métodos que sugerimos a continuación:

• Ten agua a la mano. Intenta llevar una botella de agua reutilizable cuando salgas de casa o coloca en tu refrigerador o mesa de noche una nota que te recuerde beber agua.
  
• Dale sabor. Intenta agregar limón u otras frutas para endulzar tu bebida. Esto agregará nutrientes adicionales en cada trago, lo que puede mejorar tu estado de salud más allá de la hidratación.
  
• Come alimentos densos en agua. Hasta 20% de la ingesta diaria de líquidos de una persona puede provenir de los alimentos. Frutas como la sandía o el melón, el apio y los pepinos, pueden ser una fuente abundante de agua.
  
• Establece tiempos para beber agua. Integra a tu rutina el tomar un vaso de agua antes de una reunión, una comida o cada vez que inicies una nueva actividad a lo largo del día.
  
• Beber antes de comer. Las comidas brindan una oportunidad fácil para obtener agua adicional, así que trata de beber durante la comida o antes de comenzar. La sed a menudo se malinterpreta como hambre, por lo que este truco incluso podría ayudar a adelgazar la cintura.
  
• Regresa a tu cuerpo el agua que pierde. Nuestro cuerpo pierde agua constantemente a través de la sudoración, la micción e incluso la respiración. Intenta tomar pequeños sorbos de agua durante todo el día y agrega un vaso después de hacer ejercicio o actividades al aire libre.

3. Enfócate en el progreso

Después de experimentar con estas estrategias para mantenerte hidratado revisa tus notas. ¿Qué cambió? Si alguno de estos consejos no te ayudó, simplemente ajusta tu plan e inténtalo nuevamente mañana. Beber un poco más de agua hoy, es más (y mejor) que lo logrado ayer.

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Adaptado de:

https://www.mayoclinic.org/ | Hidratación